La química es un área de estudio que se ha ido expandiendo con los aportes y descubrimientos que se han hecho por científicos de la gran mayoría de países en todo el mundo. En América Latina, México ha sido uno de los países que más ha destacado en esto. Las aportaciones a la química que se han generado en México varían entre el descubrimiento e identificación de elementos, desarrollo de medicinas y fórmulas, la detección y descubrimiento de fenómenos en el planeta.
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México y la química como ciencia
El desarrollo de la química en todo el mundo a manos de científicos ha dejado los descubrimientos más importantes, que nos han permitido avanzar y convertirnos en la sociedad que somos en la actualidad.
Las aportaciones a la química que se han generado en México han sido posibles gracias al desarrollo moderno que tiene el país y a los avances que se han hecho a nivel de infraestructura y de desarrollo de lugares que permitan el desenvolvimiento de estos estudios.
Esto no es algo que se ha hecho en este siglo; se puede decir que el origen de las aportaciones a la química que se han generado en México viene desde su propia fundación, pues desde 1551, con la Universidad Real y Pontificia de México, comenzó el desarrollo intelectual de todo el país, marcando un inicio en todo el continente.
Vale la pena destacar que, históricamente, al hacer referencia a las aportaciones a la química que se han generado en México se habla de todos aquellos aportes que han ocurrido en el país, y no necesariamente a las contribuciones hechas solo por mexicanos.
Aportaciones a la química que se han generado en México
Descubrimiento del vanadio como elemento
El científico que descubrió este elemento fue Andrés Manuel Del Río Fernández (nacido en España). No fue hasta 1794 que llegó a México, en ese entonces Nueva España, para hacerse cargo de la Cátedra de Química y Mineralogía del Real Seminario de Nueva España.
Acá pasó una gran parte de sus años en labores de investigación y de estudio de diversos minerales y también tuvo una participación activa en el desarrollo de nuevos métodos efectivos de extracción de los mismos.
En 1801, Del Río Fernández aseguró haber encontrado en Zimapán (que hoy en día es el estado de Hidalgo) un nuevo elemento metálico tras realizar varios estudios y análisis en muestras del mismo. Este metal de un color rojo intenso fue bautizado por Andrés Del Río como eritronio.
Sin embargo, en 1802, el elemento fue erróneamente clasificado como un mineral de cromo tras hacerse análisis de varias muestras en París, por lo que el descubrimiento no fue tomado en cuenta.
Años después, en 1830 en Suecia, Nils Gabriel Sefstöm condujo estudios y análisis de nuevas muestras y pudo comprobar que en realidad sí se trataba de un elemento que no aparecía en la tabla periódica. De eritronio pasó a ser conocido como vanadio, en honor a Vanadis (quien era la diosa de la belleza en la cultura escandinava), por su color rojo intenso que era atractivo y bello.
Desarrollo del primer anticonceptivo oral
De todas las aportaciones a la química que se han generado en México, esta es la que se considera más importante.
El desarrollo del primer anticonceptivo oral fue posible gracias a la invención y aplicación de una sustancia conocida como 19−noretisterona, sintetizada por primera vez por Luis Ernesto Miramontes Cárdenas en los laboratorios de Syntex, una de las empresas químicas de México, y su equipo de trabajo.
En ese momento, Luis Miramontes (México) era un estudiante trabajando en su tesis, su tutor era Carl Djerassi (Austria), y George Rosenkranz (Hungría) era parte de su equipo.
El desarrollo del primer anticonceptivo oral fue el aporte a la química que abrió las puertas a una mejor planificación familiar, además de tener repercusiones tecnológicas en la industria de la farmacia.
Desarrollo de técnicas industriales para la producción de insulina
Dentro de las aportaciones a la química que se han generado en México, la producción de insulina mediante técnicas y métodos industriales ha sido la que más vidas ha salvado en el mundo y ha sido uno de los pilares de la Ingeniería Genética.
La regulación de la insulina es uno de los procesos químicos más importantes del cuerpo humano, ya que sin esta capacidad se desarrolla la diabetes. En los pacientes con diabetes más avanzada, el cuerpo requiere suministro de insulina para poder regular el paso del azúcar en la sangre, por lo que en estos casos es necesaria su inyección/suplemento.
El mexicano Francisco Bolívar Zapata fue parte del grupo de investigadores científicos que plantearon la producción de insulina utilizando técnicas industriales; ellos lograron que la sintetización de la insulina como proteína fuese producida por bacterias, lo que permitió que se llevara a cabo a gran escala.
Descubrimiento del agujero en la capa de ozono
Mediante el análisis y el estudio detallado y profundo del ozono como elemento, José Mario Molina-Pasquel Henríquez (México), Frank Sherwood Rowland (Estados Unidos) y Paul J. Crutzen (Países Bajos) pudieron notar el comportamiento de las moléculas de este gas.
El ozono (O3) propio de la estratosfera se forma cuando la radiación ultravioleta interactúa con las moléculas de oxígeno (O2), generando una reacción inmediata.
Dentro de las propiedades de este elemento, los científicos descubrieron que el ozono se destruye a sí mismo rápidamente impulsado por la radiación ultravioleta, lo que crea un ciclo de creación y destrucción que es capaz de consumir los rayos UV; por lo mismo se conoce a la capa de ozono como un filtro para la Tierra.
Con este estudio, los científicos también notaron que los CFCs que suben hasta la atmósfera incitan la destrucción de las moléculas de ozono a un ritmo más rápido en que son creadas de forma natural, dando origen así al agujero en esta capa que amenaza con el calentamiento global.
